
"Mi trabajo explora la integridad del ser humano
moderno a través del lente de la fragmentación y la fragilidad. No concibo
la identidad como una construcción fija o unificada, sino como un sistema
descentralizado y de múltiples capas-un ecosistema de significados
personales moldeado por la memoria cultural, las contradicciones internas
y las experiencias nómadas"
-Anya
Desafiar el ethos es el principal objetivo de una residencia artística. Al cambiar el entorno cotidiano y aventurarse a un ambiente desconocido, las metodologías de creación se ajustan al nuevo contexto. Es más, los materiales que habitualmente emplea un artista en su estudio, durante una residencia -sobre todo en otro país-, se sustituyen o transforman por elementos locales u otros descubrimientos.
La posibilidad, la experimentación y el riesgo creativo acompañan el desarrollo artístico durante una residencia, es por ello que estos programas han encontrado un territorio esencial en las diversas escenas artísticas internacionales.
Paisajes internos de Anya Belyaevskaya (Moscú, 1993), es el resultado de su estancia en México en el marco de la residencia artística de KOIK Contemporary. En esta exposición la artista lleva su práctica pictórica al terreno de la instalación y la colaboración performática, expandiendo su investigación artística sobre la identidad y las múltiples capas o fragmentos que nos construyen.
La obra de Anya Belyaevskaya se integra principalmente de retratos y partes del cuerpo fragmentadas al óleo, sobre placas de vidrio y acrílico, en la línea figuración y abstracción. La transparencia y superposición que logra al suspender la pintura en el espacio (no colgada a “muro”) genera una narrativa del tránsito inestable en el que las capas del yo se entrecruzan, se difuminan y se re articulan.
Lizeth Rosano, bailarina profesional contemporánea, y el músico experimental Francisco Lozano, colaboran con Anya en la presentación de una improvisación transdisciplinaria a través del montaje de Paisajes internos. La pintura, el cuerpo en dinámica y la dimensión sonora, coadyuvan para manifestar la identidad en movimiento, oscilando entre contradicciones, en el proceso continuo de construcción y reconstrucción.
El trabajo artístico de Anya Belyaevskaya se inscribe en una sensibilidad estética y cultural que ha recibido el nombre de “metamodernismo”. Este término, acuñado por Timotheus Vermeulen y Robin van den Akker en 2010, no define un estilo ni una corriente unificada, sino una estructura de sentimiento que caracteriza el espíritu contemporáneo: un vaivén constante entre extremos.
Esta nueva “sensibilidad” se puede interpretar como respuesta al escepticismo y la ironía propias de la posmodernidad, buscando una reconciliación de contradicciones y paradojas. Paisajes internos, es un testigo en el arte contemporáneo, de esta nueva sensibilidad cultural, donde Anya Belyaevskaya propone una estética de la vulnerabilidad como vía de acceso a lo colectivo, sugiriendo nuevas formas de mirar, de sentir y de habitar lo incierto.
— Claudia Rebeca Murrieta Valladares
Curadora de la SHCP